sábado, 13 de septiembre de 2025

BUENOS AIRES COMO PRIMER INDICIO DEL HARTAZGO

Durante la semana que culmina, la bronca y la cólera estallaron en Francia, organizadas desde las redes sociales. El "Bloqueemos todo" se extiende en todo el país. Hay al menos 300 detenidos, más de 139 en París, y 80.000 fuerzas de seguridad desplegadas y bloqueos en todos lados. Se esperan al menos 100.000 personas movilizadas en toda Francia. El objetivo es el presidente Emmanuel Macron y la indignación frente a su plan presupuestario. Una revuelta que une a estudiantes, a las clases medias, y a la que se han sumado la izquierda radical y los anarquistas de los Black Blocs. En Medio Oriente, el sionismo - mayoritariamente repudiado en el mundo entero - continúa hostigando al pueblo palestino, asediando ahora a la flota internacional que se acerca a la región a expresar su solidaridad concreta con las víctimas. En tal contexto, más de 15 provincias argentinas se movilizaron, se presentaron denuncias judiciales - por ejemplo, ha dado inicio una investigación para saber si existen acuerdos entre la empresa israelí Mekorot, la UNCUYO y el gobierno de Mendoza, en el marco del Plan Provincial del Agua - y el reclamo fue claro: Seguiremos en las calles y en los tribunales hasta que se confirme oficialmente que Argentina no recibirá a Netanyahu, prófugo de la Corte Penal Internacional. De este modo, nuestro pueblo volvió a demostrar su compromiso con la justicia y los derechos humanos. Y, en las últimas horas, la Asamblea de la ONU votó por la creación del Estado Palestino, con 142 votos a favor, 10 en contra y 12 abstenciones. Paralelamente, el inesperado resultado electoral producido en las elecciones legislativas bonaerenses, que tomó por sorpresa a oficialistas y opositores, tuvo una mayor repercusión en la prensa internacional, tanto conservadora como progresista, más que en los medios locales. En consecuencia, el FMI optó por mantenerse en silencio ante la derrota electoral de Milei y fijar posición técnica cuando Caputo defina medidas para contener al mercado. Sin embargo, el organismo multilateral asume que la nueva situación podría afectar el cumplimiento de la meta vinculada a la acumulación de reservas.

 

En el campo de los análisis políticos, tanto arriesgar pronósticos como considerar el panorama en plena turbulencia, suele tener más mérito que cuando los acontecimientos decantan y su interpretación abunda.

Procuraremos igualmente volver sobre algunos datos, pero no insistir demasiado sobre lo ya expresado al respecto.

En primera instancia, y para no opinar en abstracto, corresponde recordar que prácticamente con todas las mesas escrutadas, según fuentes de la Justicia Electoral bonaerense y de la Nación, los indicadores recabados en las recientes elecciones legislativas de la Pcia. de Buenos Aires han sido los siguientes:

Sobre un padrón total de 14.376.592 potenciales votantes, se registró una participación de 8.766.846 (60.98%) y una abstención de 5.609.747 (39.02%, porcentaje que analistas de distinto signo ideológico atribuyen mayormente a disconformes de LLA y el PRO) 

El PJ obtuvo 3.820.119 votos (26.57%), LLA 2.723.710 (18.94%), y el FIT - U 353.287 (2,45%), en todos los casos respecto del padrón.

Si en términos relativos (dado lo inédito de esta compulsa) se compara esos resultados con los de 2023, hubo 316.659 electores más, y 1.910.101 votantes menos (el subrayado es nuestro)

En aquel año, la participación ascendió al 76%, y en este descendió al 61%. Así, la abstención creció en 2.226.761, perdiendo el PJ 510.363 votantes. 

En 2023, LLA y PRO fueron separados y ambos sumaron 4.930.876 votos. Este año fueron juntos y sacaron 2.723.710. De modo que perdieron 2.207.166 votos. Mientras que el FIT - U perdió 20.532 votos

Sin poner en tela del juicio ni el alivio ni mucho menos el entusiasmo que aún experimentan lxs muchxs bonaerenses que sufragaron contra el régimen autocrático vigente, en atención a los datos reseñados deberíamos aceptar que la crisis de representación política, así como la insatisfacción democrática, están bien lejos de ser fenómenos del pasado.

En todo caso, como lo señalara el sociólogo Marcelo Langieri - con quien compartimos un grupo de interconsulta sobre la realidad política integrado por destacados exponentes del pensamiento crítico - “es importante subrayar que se trata de un punto de inflexión en un contexto defensivo” y que “no se votó peronismo sino al peronismo como vehículo” (nuevamente, el subrayado es nuestro) 

Compartiendo plenamente su señalamiento, diremos que de momento confiamos más en que se esté cerrando el Ciclo Milei (ni siquiera aventuraremos que en nuestro país vayan a desaparecer estas nuevas derechas recalcitrantes) que en que el movimiento fundado por Juan Perón esté volviendo a seducir al electorado, en tanto su disputa interna actual consiste en una confrontación por liderazgos y no por un programa, tópico - este último - que aún sigue ausente, salvo en el sector que representa Juan Grabois, cuya perspectiva aún dista de haber conectado con el resto del movimiento. Y esto, más allá de la legítima euforia que produce el resultado de las legislativas bonaerenses en un contexto de tanta zozobra, al menos hasta nuevo aviso, convierte lo sucedido en un hecho más cuantitativo que cualitativo. 

Sin ir más lejos, poco después de ese resonante resultado electoral, Facundo Tignanelli, mano derecha de Máximo Kirchner, consultado por el periodismo acerca de si la Presidenta del PJ había felicitado o no al gobernador, declaró “Cristina está presa hace 100 días, Axel nunca la visitó y no hacemos una novela de eso”.

Lo acontecido da cuenta, además, de que la recesión pudo más que la inflación (el antropólogo Pablo Semán suma a ese registro la sensación popular de que ”se chorearon el ajuste”), empoderando al mandatario bonaerense e inaugurando un proceso de tensa renovación de liderazgo al interior del peronismo, cuyos pormenores se pondrán de manifiesto de aquí a los comicios nacionales de octubre. 

A propósito de ello, en los últimos días el politólogo Andrés Malamud arriesgó la opinión de que el éxito del “experimento Kicillof” en cuanto a desdoblar las elecciones bonaerenses - contradiciendo empeñosamente a la Presidenta del PJ - marca el fin del ciclo kirchnerista y el retorno a la escena del peronismo. El tiempo lo ratificará o no. 

En cualquier caso, no estaría de más confrontar ese resultado electoral con la trajinada y agorera idea de que “el pueblo argentino viró hacia la derecha” o padece de una infinita tolerancia ante el sufrimiento. 

El nuevo escenario determinará con qué velocidad se debatirá la nueva ley de DNU en Diputados. Ese proyecto endurece la posibilidad del uso de la herramienta para “esquivar” al Congreso, dado que el oficialismo quiere llegar a diciembre sin cambios. No obstante, hay tensión en el bloque del PRO y la oposición confía en tener los votos para sancionarla. 

A todo esto, Macri y su gente ya piensan en el postmileísmo para después de las elecciones de octubre. El expresidente mantiene silencio público, pero su entorno lamentó la “mala praxis” libertariana en los comicios bonaerenses y hay enojo por el “ninguneo” al trabajo territorial. Es más, los “macristas con peluca” exigen a gritos la salida de Karina ya.

Por su parte, nunca más lejos de la condición de estadista, tras la aplastante derrota electoral, un empecinado Javier Gerardo Milei descartó cambios en el gabinete, reflotando una mesa política nacional y pidiendo convocar a los gobernadores. Así lo definió luego de algunas reuniones a puertas cerradas en la Casa Rosada, donde se percibió el nerviosismo que provocó el traspié ante el peronismo bonaerense. Guillermo Francos quedó encargado de llamar a los mandatarios provinciales, comenzando por tantear a Schiaretti y Weretilnek para un posible acuerdo. Puenteando a Santiago Caputo, el Primer Mandatario le ofrece al cordobés cargos en el gobierno y la presidencia de la Cámara de Diputados. Sin embargo, Santiago aprovechó la derrota para empujar a los Menem y ahora aspira al control de la elección de octubre. Tras la paliza, Las Fuerzas del Cielo le reclaman al presidente que aplique cambios en la conducción. Mientras, Sebastián Pareja continúa al frente de LLA en la Provincia. 

De modo tal que ese “lifting” presidencial no ha dejado satisfecha a la propia tropa, ni a los aliados ni a las provincias. Las horas posteriores a la elección bonaerense dejaron sabor a poco y enojo en sectores diversos que el Gobierno necesita para afrontar el escabroso tramo hacia octubre. Por ahora solo hubo una tercera reunión de Gabinete y no se prevén mayores anuncios ni cambios.

Mientras esa reunión transcurría, la cuenta oficial de Francos comunicó la constitución de la Mesa Federal, que integrará junto al ministro de Economía, Luis Caputo, y el flamante ministro del Interior, Lisandro Catalán, hijo de un Ministro de Educación de la dictadura oligárquico - militar genocida. De esta manera, el Gobierno anunció que esa cartera dejará de ser una vice jefatura de Gabinete y volverá al rango ministerial que tuvo históricamente. En la Jefatura de Gabinete están atados a las herramientas que el Presidente les dé para poder negociar. “A mayor cantidad de recursos, más posibilidad de poder persuadirlos”, dejó trascender un operador de ese segmento. No se descarta que el Ejecutivo haya dado la venia para que el Gobierno comience a negociar importantes cargos a diferentes provincias aliadas a los fines de darles más previsibilidad en el vínculo con la Nación.

En tanto, fiel a su proverbial tesitura de los últimos años, la CGT se endurecerá para apuntalar el triunfo del PJ en octubre, pero descarta hacer más paros generales. Pese a que hay matices en la reacción sindical ante la derrota electoral de Javier Milei, todo indica que habrá una mayor confrontación con el Gobierno, con presiones por las paritarias y más movilizaciones. Nada nuevo bajo el sol.

Simultáneamente, empresas como Ternium, Acindar, Celulosa Argentina, Algodonera Avellaneda, o Vassalli enfrentan la dramática disyuntiva de parar la producción o reconvertirse. Como de costumbre, las consecuencias son despidos masivos, salarios impagos, y recortes de derechos, ante lo cual los trabajadores pelean a brazo partido para no pagar la crisis industrial, muchas veces prescindiendo de sus representaciones sindicales. 

Las preguntas que el nuevo escenario habilita a formular no son pocas: ¿Será tan sencillo para el presidente, como se desprendería de su esquizofrénico discurso de aceptación de la derrota, mantener el rumbo careciendo de poder de fuego?, ¿encontrará este simbronazo correlato parlamentario?, ¿qué destino espera al RIGI y al Protocolo Antipiquete?, ¿podría modificarse la sentencia que condenó injustamente a prisión a la Dra. Cristina Fernández de Kirchner?, en caso de revalidar títulos, ¿qué peronismo volvería, si vuelve: puede un programa neodesarrollista funcionar como trampolín hacia un mayor bienestar en este contexto global? Estos son solo algunos interrogantes que seguramente se irán despejando con el correr de días o meses.

El editorial publicado al día siguiente de los comicios bonaerenses en el portal de la Revista Crisis, firmado por Mario Santucho, culmina diciendo: “La gran pregunta es cómo la ultraderecha logrará frenar ahora el mal genio del dios mercado. Salvo algún movimiento magistral, la travesía hacia octubre será un verdadero martirio. La lupa estará puesta en cómo se reseteará el gobierno. De qué manera resolverá su brutal interna. Y, sobre todo, qué sector del poder económico se aprovechará de su debilidad para hacerle el famoso take over. Pero no deberíamos descartar una crisis institucional sin retorno. El temido game over. A veces, cuando menos uno se lo espera, las fantasías se convierten en realidad”. 

Por lo pronto, no conviene “dormirse en los laureles”, dado que, si bien el voto bonaerense tiene una enorme gravitación nacional, en una futura elección general la Argentina Profunda también dirá lo suyo, y ahí el conservadorismo es mayor. De modo que 2027 aún queda lejos y continúa siendo un enigma. 

Seguramente la ventaja opositora también sorprendió al llamado “círculo rojo”, ya afanosamente empeñado en evitar que el panelista de Intratables continúe poniendo en riesgo sus intereses. 

Si “para muestra basta un botón”, conviene tomar nota de que hoy por hoy la estrategia implementada por un Paolo Rocca, por ejemplo, pone en riesgo 7.000 empleos directos e indirectos y amenaza con detener la producción de dos millones de toneladas anuales de acero plano, un insumo esencial para la industria nacional. Rocca, aportante entusiasta del experimento libertariano argentino, ahora cuestiona al gobierno porque no sostiene las protecciones arancelarias que lo convirtieron en quién es.

Hay que creer o reventar que los vicarios del poder - como la runfla de payasos (Lali dixit) que administra el gobierno - son circunstanciales, mientras que los dueños de todo son permanentes. “Por ahora”, como alguna vez expresó el Comandante Hugo Rafael Chávez Frías.

En tanto, más allá del veredicto de las urnas, en las últimas horas tuvo lugar una marcha de Congreso a Plaza de Mayo, convocada por el sindicalismo combativo, piqueteros y jubilados, bajo las consignas de “Basta de estos gobiernos de coimeros y ajustadores. Por un paro de 36 horas y plan de lucha para derrotar el ajuste de Milei, los gobernadores y el FMI. No a los vetos al Garrahan y las Universidades. Basta de vetos a los reclamos populares”.

De este modo, los sectores más dinámicos de un pueblo que lejos está de sentir más floja la soga que lo ahorca, se aprestan a realizar una nueva y seguramente numerosa Marcha Universitaria.

Y, conscientes de que la Madre de las Batallas por librar es contra un débito impagable que le arrebata el plato de comida y la oportunidad de trabajar - también a celebrar la Semana Mundial de Acción sobre la Deuda, a realizarse del 13 al 18 de octubre, evento que incluirá una sesión del Tribunal de los Pueblos y la Naturaleza contra el FMI y el BM enfocando sus impactos en el Agua, la transición energética y el clima.

Cada vez que se aguza la mirada, detrás del árbol vuelve a advertirse el bosque. -

 

JORGE FALCONE 

No hay comentarios:

Publicar un comentario